la llanura permanecerá llana y solitaria, las
bardas rojizas y desgranadas, de a poco, muy lentamente, por el viento
contestarán con bienvenidas a los paseantes, el cielo nocturno inmenso y
estrellado tan arriba-que ni las aves conocen de él- permanecerá
inmutable
y yo
tengo un apocalipsis
para armar
No hay comentarios:
Publicar un comentario